Secret Hunter

Primera experiencia en Scape Room, hemos realizado Suite 405 con un niño de 8 años, y ha sido todo un hallazgo este tipo de actividades para hacer con él. Lo hemos pasado genial, y el Game Master (no sé el nombre) ha sido encantador, súper pendiente de nuestro nene y haciéndolo muy partícipe de la historia. Sin duda probaremos más escenarios!!!!

Hicimos la sala Malibu, al leer tantas reseñas positivas y hemos salido encantados, la ambientación es espectacular y es una sala muy divertida, nuestras hijas se lo pasaron genial, aunque se llevaron algun susto. El game master estuvo atento en todo momento. Volveremos sin duda

Estando de vacaciones por Alicante nos entraron ganas de hacer un escape y decidimos sobre la marcha reservar para hacer Malibú, una sala de la que ya nos habían hablado muy bien en otros escapes, sobretodo cuando pedíamos alguna recomendación de comedia o algo realmente divertido. En primer lugar, decir que no hubo ningún problema con hacer una reserva con solo unas pocas horas de antelación. La historia en sí es muy buena y desde que llegas te metes totalmente en tu papel. El chico que tuvimos de Game Master lo hizo de lujo y nos encantó su papel. Por nuestra parte, simplemente decir que aunque fuésemos solo dos, nos divertimos y nos reímos muchísimo durante el juego. Es una de esas salas que recomendaría para parejas, con muchos tipos distintos de puzzles y extremadamente bonita. Un 10.

Fuimos dos personas a hacer el escape room de Suite 405 y la experiencia fue increíble. La ambientación está muy lograda y te mete en la historia desde el primer minuto. Las pruebas son ingeniosas y variadas, y el GM sabe cuándo darte la pista justa para avanzar sin perder la emoción. Totalmente recomendable.

Hola!! Escribo esta reseña desde la absoluta sinceridad y respeto: Hoy hicimos la sala de Malibú con una niña de 9 años, y lamentablemente la experiencia fue bastante negativa. Es cierto que solo éramos dos personas más la niña y que llegamos unos 5-10 minutos tarde (aunque he de decir que estábamos esperando en la otra puerta, ya que no sabíamos que la entrada era diferente). No soy experta en escape rooms, pero he hecho algunos, y siempre he recibido ayuda para poder avanzar si nos veían al grupo bloqueado, especialmente cuando hay niños, y además el trato ha sido siempre muy amable. Esta ha sido nuestra primera experiencia realmente desagradable. La game master apenas nos dio pistas, a pesar de que las pedíamos (puede que hubiera algún problema con el sonido porque a veces no la podíamos escuchar bien), y hubo momentos muy incómodos en los que estábamos completamente bloqueados sin saber cómo continuar. En general, su actitud nos pareció distante y poco amable, especialmente al final. Algunos de sus comentarios nos hicieron sentir juzgados o incluso ridiculizados, lo cual fue muy incómodo (no digo que fuera su intención, pero el tono y los comentarios nos hicieron sentir así, lo que nos bloqueaba aún más). Además, nos hizo terminar la partida de forma bastante abrupta, saltándonos varias pruebas sin darnos la oportunidad de intentarlas o al menos entenderlas. Cuando le pedimos si podía explicarnos un poco lo que nos había faltado o cómo se resolvían algunos enigmas, su respuesta fue muy escueta, diciendo algo como que "nos quedaban muchas cosas" y "mucho tiempo". No nos dio una explicación más detallada ni se tomó el tiempo de comentar los pasos que faltaban, lo cual habría sido de agradecer para, al menos, poder aprender algo o cerrar la experiencia con mejor sabor de boca. La niña no entendió prácticamente nada del juego y no lo disfrutó. Decidimos hacer esta sala porque habíamos leído que era muy divertida, pero nuestra experiencia fue todo lo contrario. Pensamos que la game master debería haberse adaptado al nivel del grupo, sobre todo considerando que veníamos con una niña pequeña, y que el objetivo debería ser lograr que todos disfruten y puedan terminar el juego aunque sea dando más pistas o dándole mayor dinámica al juego. En lugar de eso, nos hizo sentir muy incómodos durante y después de la partida. Me sabe fatal escribir esta reseña, pero es la realidad: salimos con una sensación realmente mala, y es una pena. No recomendaría este escape, al menos con la experiencia de hoy en Malibú.

Hicimos la sala Malibú por recomendación de un familiar. Con más de 70 salas a nuestras espaldas, esta sala supo sorprendernos, hacernos reír y salir con un buen rollo impresionante. Alejandra, nuestra Game Master, involucrada desde el minuto 1, gracias por todo. La sala merece muchísimo la pena, apta para todos los públicos. Pruebas originales y decoración que llama muchísimo la atención, completamente recomendada.

Nos recomendaron el hotel unos amigos, la habitación 405 genial aunque nos costó 20 minutos abrir los cajones de la mesita y otros 20 el armario. El recepcionista se portó genial y nos facilitó la estancia. Lo recomendamos